Capturan adulto mayor que habría mandado a matar a su expareja de 20 años

Dos sicarios en moto asesinaron a la estudiante de cosmetología Julieth Juliana García Pérez, la noche del 9 agosto de 2016, en el barrio Alcalá del corregimiento San Antonio, Sur de Medellín. Por este crimen un juzgado impuso medida de aseguramiento en centro carcelario contra su excompañero sentimental, Hernán de Jesús Moreno, de 61 años de edad como presunto autor intelectual.

La joven de 20 años de edad fue atacada a tiros cuando llegaba a su casa después de cumplir su jornada académica.

Con el apoyo de la familia de la víctima, los investigadores del Cuerpo Técnico de la Fiscalía, iniciaron una minuciosa búsqueda de elementos materiales probatorios para tratar de establecer los móviles del homicidio e identificar a los responsables.

Agotada la fase de indagación, este 9 de abril  un fiscal de la Unidad de Vida obtuvo la captura del comerciante.

Los investigadores lograron establecer, que el hombre empezó a cortejar a la mujer desde que ella tenía 12 años de edad y cuando cumplió los 14, se fueron a vivir juntos. Además, se estableció también que el comerciante le regaló una casa a la familia de la joven.

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Luego de algunos años de convivencia, la víctima le habría expresado a su compañero que ya no quería continuar con la relación afectiva porque ya no lo veía como su pareja sino como un padre, y dieron por terminada la convivencia. Varios meses después, y ante la insistencia del hombre, la pareja decidió darse otra oportunidad.

Los técnicos judiciales determinaron, que tres meses antes del homicidio, el presunto agresor comenzó a presionar a la joven y amenazó con matar a un conocido de ella, quien residía en el Oriente antioqueño, por una supuesta infidelidad.

Se evidenció además, que el 9 de junio de 2016, el  adulto mayor trató de lanzar a la muchacha desde el piso 27 de un edificio, pero ella lo golpeó en los genitales y huyó del lugar.

Según los familiares de Julieth Juliana García Pérez, el 5 de agosto de 2016, es decir, cuatro días antes del homicidio, dos hombres llegaron hasta la casa de ella con el pretexto de cobrarle una supuesta deuda de 10 millones de pesos. También relataron que el 8 de agosto del mismo año, Hernán de Jesús Moreno los contactó para verificar dónde estudiaba la joven y cuáles eran sus horarios.

Estos y muchos otros indicios obtenidos por la Fiscalía, permitieron imputar al presunto agresor el delito de homicidio agravado en calidad de determinador.