Autoridades ambientales reportaron la muerte de un mono cabeciblanco que, pese a que estuvo sometido en varios procesos de recuperación, no pudo sobrevivir debido a permanecer durante varios años en cautiverio.
La mala práctica de tenencia ilegal de fauna hizo que el animal presentara fractura de sus cuatro caninos, así cómo también baja condición corporal.
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"El cautiverio le generó una enfermedad metabólica ósea en su cuerpo, fractura en el fémur derecho y la imposibilidad de mover su articulación, adicionalmente, se le encontró amputación en su cola", informó el Área Metropolitana, siendo esta la autoridad ambiental del Valle de Aburrá.
La noticia, a propósito, la contó el Área Metropolitana durante la conmemoración del Día Mundial del Mono, una fecha importante para llamar la atención e invitar a la ciudadanía a generar conciencia ambiental frente al cuidado de los animales.
Desde allí indicaron, además que, como este mono, otros 84 primates permanecen y luchan por su vida en el centro de atención, tras ser víctimas, en su gran mayoría, por el tráfico de fauna.
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"El Tití Cabeciblanco, especie endémica de Colombia; es el más traficado con 38 registros en el Centro durante este año, seguido por el Mono Cariblanco y el Mono Aullador. Colombia alberga una gran diversidad de primates que habitan los bosques tropicales y son fundamentales en la regeneración de los ecosistemas. A través de la dispersión de semillas y el control de plagas, los monos son esenciales para la salud de los bosques, que a su vez son vitales para mitigar el cambio climático y garantizar el equilibrio ambiental", reportaron desde el Área Metropolitana