Millos 0 Tolima 1, dejó pendiente clasificación y aumentó mala racha de los embajadores
Si en unos años preguntan qué tal fue el partido, algunas cosas se habrán olvidado lo que estará en la mente es que Tolima le ganó 1 a 0 a un Millonarios de Gamero que venía en mala racha y se prolongó en Ibagué estadio Manuel Murillo Toro, próximamente Gabriel Camargo Salamanca.
Lea también: Impactantes imágenes muestran como un rayo impactó un arco en el estadio El Campin
Nos olvidaremos de la pelota que puso a circular Cuesta debajo de su arco y el balón de Daniel Ruiz que dio en el palo, o la falta de reacción de Pereira para meterla, lo que cuenta es que el Chileno Rodrigo Ureña le ganó en cargo al Pecho frio de Cataño y los demás defensores y metió un tramacazo que todavía le duele hasta al propio balón, ni Montero ni sus defensas podían hacer algo, peligraba su integridad del taponazo, fue un apoteósico 1 a 0, no un título no una clasificación, pero uno de los triunfos con mejor sabor del conjunto pijao.
Una despedida como se le pedía a una plantilla que luchó este año por darnos satisfacciones, poco por reprochar, las lesiones, los árbitros, el calendario, el bajón o curva de rendimiento que duró por encima del tiempo normal, y ese penalti ante Nacional nos dan un balance que se quedó corto en varios aspectos, pero al menos el último acto dejó un buen sabor, la hinchada a propósito se deshago contra los “indeseables” ex Tolima, el arquero Montero y en especial que le nos privó de un título prácticamente Daniel Cataño.
Le puede interesar: Colón y sus esfuerzos en el inicio del Clásico RCN: "la etapa más dura de mi carrera"
De todo esto es bueno que el público no se sobrepasó pero si le hizo saber sus sentimientos a los del azul y también a los Pijaos que salieron aplaudidos por la entrega y el corazón que pusieron para defender los últimos 15 minutos esa victoria, que ojalá signifique también seguir soñando con la Copa Libertadores 2023, lo que viene es Envigado con ese partido despedida definitiva para nosotros, los de las cuentas siguen en modo milagro.