El Cardenal, Luis José Rueda, exigió la liberación del padre de Luis Díaz

El actual cardenal, Luis José Rueda Aparicio, estuvo durante dos días en la capital Santandereana, la razón fue la celebración de su reciente nombramiento de gran importancia en la iglesia católica. 

En una ceremonia realizada en la catedral de la Sagrada Familia, el cardenal comentó sobre su designación: “La iglesia ha sido servidora en Santander, de toda la historia, ha acompañado los momentos difíciles en el magdalena medio, en la zona de García Rovira, la zona de provincia de Vélez, Guanentá, Comunera y aquí Bucaramanga, la iglesia ha estado acompañando y seguirá acompañando porque la iglesia es el pueblo de Dios, son ustedes los laicos, las religiosas, nosotros los sacerdotes y  Santander es un tierra de fe”. 

Lea También: ¿Qué sigue para Colombia tras suspensión del diálogo con las disidencias de las Farc?

El purpurado también se refirió sobre varios temas de importancia de orden nacional, entre estos el secuestro del padre del jugador del Liverpool, Luis Díaz, conocido como el Mane Díaz, el sumo sacerdote exigió la inmediata liberación: “Queremos decirle a quienes tienen raptado al señor Luis Díaz y a todos los que están privados de la libertad, porque en Colombia hay muchos secuestrados desafortunadamente, es un drama que no ha pasado este país y esta historia, queremos exigirles que por favor respeten a los colombianos, que los colombianos puedan moverse libremente”.

Sobre el levantamiento de la mesa de diálogos por parte de las disidencias de las FARC, también comentó: “Es lamentable que haya esos momentos críticos durante los procesos, pero quiero decirles que  el proceso no es único y que el verdadero proceso lo lleva en el corazón cada ser humano que se dedica, hombre o mujer, a trabajar por la paz”.

Recomendamos Leer:Video: Accidente de camión cargado de pólvora desata un espectáculo de fuegos artificiales

Después de compartir en la entrada de la catedral con la gente que lo recibió con entusiasmo, en compañía de un niño quien apareció disfrazado de cardenal, el también Arzobispo de Bogotá, ingresó a la iglesia a presidir la eucaristía, donde habían más de 900 personas que lo esperaban.