Dos subintendentes y cuatro patrulleros de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, quienes capturaron de manera ilegal a un joven y le dieron una brutal golpiza, fueron sentenciados por el Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Medellín.
En los próximos días, el juez que emitió el sentido de fallo condenatorio fijará el monto de la pena para los suboficiales, Hernando Pachón Beltrán y William Felipe Foliaco Segura; y los patrulleros Steven José Salcedo Henríquez, Juan David Passos Divasto, César Augusto Hernández Guerrero y Óscar Yamit Salas Lopera, culpables por los delitos de privación ilegal de la libertad y tortura.
De acuerdo con la denuncia formulada por un hombre de 26 años de edad, el 3 de octubre de 2017, a las 8:30 de la noche, varios uniformados lo retuvieron en vía pública porque la moto en la que se movilizaba no tenía en regla la revisión técnico- mecánica ni el seguro obligatorio a terceros (Soat).
El joven declaró ante las autoridades que fue conducido hasta el puesto de Policía del barrio Villa Hermosa, en el Oriente de la capital antioqueña y allí fue golpeado durante tres horas, luego de ser señalado como presunto responsable de un supuesto atentado que sufrieron los uniformados días antes.
La vida quedó en libertad a la media noche y se dirigió a la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía, para dar a conocer los hechos.
En la denuncia explicó de manera detallada los sitios de la estación de policía en los que había sido atacado con patadas, puños, planazos y amenazas con arma de fuego.
Para verificar la información obtenida, expertos en criminalística del CTI Seccional Medellín se trasladaron hasta el lugar y, mediante la utilización de luces forenses, obtuvieron rastros y muestras de sangre en tres puntos específicos de la edificación, que coincidieron con los señalados por el ofendido.
De acuerdo con el informe del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, la víctima recibió heridas en la cara, la espalda y el abdomen, que le generaron una incapacidad provisional de 10 días.
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Los seis miembros de la Fuerza Pública fueron capturados en marzo del año 2018 por el CTI, con el apoyo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, pero no aceptaron los cargos, pese a las pruebas en contra que presentó la Fiscalía.