[FOTOS] Negro Ramiro: el nombre que le dio una familia campesina de Antioquia al osezno que tuvieron por dos meses

Enfermo y desamparado, así dice Libardo Gutiérrez que encontró a un osezno de la especie de oso de antejos, en una zona boscosa del Nordeste antioqueño. Lo cogió y se lo llevó para su casa, donde lo auxilió, alimentó y lo cuidó durante casi dos meses.  

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En un día normal, en el que salió a trabajar, el campesino del municipio de Remedios se encontró con este pequeño oso, a quien nombró como el Negro Ramiro, que por esos meses fue alimentado con comida casera y tratado como un animal de compañía, conviviendo con los demás miembros de la familia.  

Esto lo cuenta Libardo Gutiérrez, que también detalla que, cuando le dijeron que no debía tenerlo en su casa y que debía reportarlo, aceptó entregarlo de manera voluntaria a Corantioquia, como autoridad ambiental en el territorio.  

Yo estaba barequeando, entonces lo vi enfermo, lo cogí y me lo llevé pa' la casa y le puse droga. Y ya después mostré una foto por ahí, me dijeron que llamara a Corantioquia pa' que le hiciera entrega, y así hice, llamé más bien pa que se lo llevaran al Negro Ramiro.

Corantioquia fue alertada por un actor estratégico del Magdalena Medio que les avisó sobre la presencia del oso en ese hogar campesino. Hasta allí llegaron para sensibilizar a la familia y a los demás habitantes de la vereda Puna de Remedios sobre la importancia de no tener a los animales silvestres en cautiverio.  

Por eso Libardo Gutiérrez también hizo un llamado a respetarlos y a dar aviso en caso de que alguien se encuentre un animal silvestre, como le pasó a él.  

Una invitación a la gente, para que todos los animales que tengan en cautiverio, los entreguen, hagan el favor, para que ellos tengan un mejor ambiente sueltos en la naturaleza.

Por su parte, Liliana Taborda, la directora de Corantioquia, detalló cómo se encuentra el Osezno y qué están haciendo con él.  

Un oso de anteojos de aproximadamente tres meses, lo recibimos y está en este momento en valoración con todo nuestro equipo veterinario, biólogo y zootecnista. La idea es poder tener con él un proceso de rehabilitación adecuado.

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Corantioquia les recordó a los habitantes de los 80 municipios de su jurisdicción que, en caso de encontrarse con fauna silvestre en peligro, eviten acogerlos como animales de compañía, ya que esto puede afectar el ciclo natural de los ecosistemas y las diferentes especies que los habitan. Por eso es fundamental alertar de inmediato a la autoridad ambiental.