Mineros tradicionales en Antioquia esperan que la Agencia Nacional de Minería facilite la formalización

Tras la decisión de la Agencia Nacional de Minería de retomar sus funciones, que habían sido delegadas a la Gobernación de Antioquia desde el 2001, hay diferentes opiniones al respecto. Ya se ha escuchado hablar mucho sobre la posición del actual gobernador, del gobernador electo, de la bancada antioqueña, pero, ¿qué hay de los pequeños mineros?  

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Para conocer sobre esta visión, que puede ser diferente a la de las grandes empresas mineras, hablamos con Óscar Jiménez, líder socioambiental del Nordeste antioqueño, que trabaja con mineros ancestrales y tradicionales, quien nos expuso la opinión de algunos de ellos de una de las tres subregiones mineras de Antioquia.  

Inicialmente es importante señalar que el sector minero tiene grandes retos en la formalización, especialmente porque hay una resistencia de parte de la población, sumado a que en muchos territorios no están de acuerdo con la presencia de trasnacionales y de megaproyectos mineros. 

En ese sentido, el líder socioambiental afirma que los mineros tradicionales se ven relegados a pequeñas áreas, mientras la mayoría de los títulos van a las trasnacionales, lo que también genera tensiones en los territorios, como se ha visto en municipios como Buriticá. Por ello es que es necesario que se agilice el proceso de formalización que, en cabeza de la delegación minera en Antioquia, según este, no fue tan sencillo y sí fue ''engorroso''.  

Adicionalmente, este reto de la formalización también implica la bancarización de los pequeños mineros, que requiere de ganarse su confianza y acompañarlos en estos procesos, por lo que se necesita una presencia más fuerte en los territorios, y se espera que con la Agencia Nacional de Minería y sus nuevas sedes en municipios como Caucasia, El Bagre y Buriticá, esto se cumpla. Atendiendo así a las necesidades de descentralización, la articulación con las autoridades y líderes ambientales.  

Por su parte, Rubén Darío Gómez, secretario de la Confederación Nacional de Mineros de Colombia, explicó que en otras regiones del país también existían delegaciones mineras, que tampoco fueron prorrogadas, y que actualmente están a cargo de la Agencia Nacional de Minería.  

Por ello es que considera importante el fortalecimiento de los Puntos de Atención Regionales, y se vele por atacar la corrupción que puede darse en Secretaría de Minas.  

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Con respecto a lo que se ha dicho de que la decisión del presidente Gustavo Petro de no prorrogar la delegación minera en Antioquia es una decisión política, Rubén Darío Gómez señala que el gobernador electo del departamento, Andrés Julián Rendón, y el alcalde electo de Medellín, Federico Gutiérrez, cometieron un error al creer que confrontar al mandatario del país era una buena alternativa para la gobernabilidad, lo que en realidad traería serias consecuencias.