Icbf asegura que ahora prioriza la contratación con organizaciones con base comunitaria.
Nuevamente la atención está puesta en el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) que, desde hace alguna semanas, ya estaba sobre el radar por demoras en contratación para que los niños ingresaran a los jardines.
Ahora la propia directora, Astrid Cáceres, alertó sobre presuntas irregularidades en cientos de contratos. Según afirmó, se hallaron 220 contratos en poder de 59 operadores y con el mismo representante legal.
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“Encontramos contratos de operadores que tristemente han tenido mayor cantidad de casos de muertes de niñas y niños asociados a la desnutrición. Con estas instituciones el Icbf ha dejado de contratar, promoviendo el control a la veeduría ciudadana. Además, organizaciones o fundaciones con contratos para la atención de la niñez que han tenido relación directa con clanes políticos”, alertó Cáceres.
Sobre las irregularidades; además de coincidir el mismo representante legal, sucedía lo mismo con la dirección domiciliaria, fecha de constitución, alcance y “error en el objeto”.
Otra de las inquietudes es que, tras una inspección, de la cual hizo parte la Secretaría de Transparencia de la Presidencia, se identificó personal de nómina con valores más altos que los pagados a los colaboradores de la entidad. A esto se suman menores tiempos de los previstos para la ejecución de proyectos con lo cual se evitarían el pago a proveedores.
El Icbf aseguró que está poniendo en marcha otro sistema de contratación que pone como prioridad a las organizaciones comunitarias. Esto para ayudar a que los derechos de los menores no sean vulnerados.
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Fuente
Sistema Integrado de Información
