La JEP imputó crímenes de guerra y lesa humanidad contra el general retirado Mario Montoya Uribe

Los magistrados de la Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) decidieron formularle imputación al excomandante del Ejército Nacional, general retirado Mario Montoya Uribe, por varios casos documentados de falsos positivos que se registraron en el departamento de Antioquia.

En desarrollo de las indagaciones de la JEP el oficial en retiro ha sido mencionado en repetidas oportunidades durante las versiones voluntarias rendidas por otros militares ante este tribunal especial.

Así mismo, el general retirado fue mencionado en los informes entregados por diferentes organizaciones de derechos humanos y por las víctimas acreditadas ante la JEP.

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Sin embargo, el excomandante del Ejército siempre ha negado tener algún tipo de responsabilidad en los casos de ejecuciones extrajudiciales que se le atribuyen.

Según la verificación de la JEP este llamado a responder en imputación se relaciona con casos de falsos positivos documentadas por los magistrados en hechos ocurridos entre 2002 y 2003, cuando se desempeñó como  comandante de la Cuarta Brigada del Ejército. 

De acuerdo con las pruebas e información recolectada por los investigadores durante su ejercicio de comandancia en la Cuarta Brigada del Ejército Nacional, entre el 1 de enero de 2002 y el 15 de diciembre de 2003, se presentaron casos de ejecuciones extrajudiciales que fueron cometidos por integrantes de unidades adscritas a esa institución.

En relación con este caso, la JEP analizó varios informes técnicos con abundante material probatorio de la Fiscalía General de la Nación que demostrarían la supuesta responsabilidad en estos graves hechos del general retirado Mario Montoya.

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Igualmente, se destaca que varios de los militares que salpicaron en estos graves hechos al oficial retirado hacían parte del Batallón de Artillería Número 4 Jorge Eduardo Sánchez.