Un nuevo caso de violencia intrafamiliar se registró en Neiva, Huila, cuando una mujer decidió quemarles las manos su dos pequeñas hijas como un ‘método’ de castigo.
Según revelaron las autoridades, el hecho se registró la semana pasada en el asentamiento Nueva Esperanza, cuando la madre se enteró que sus hijas tomaron sin su permiso un dinero producto de la venta de tamales.
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La mujer completamente enfurecida procedió a castigarlas quemándolas. Según declaró la señalada de violencia, colocó una cuchara sobre la estufa para así calentarla con la llama y luego la puso en las manos de las niñas de 7 y 9 años, quienes tuvieron que ser remitidas de inmediato a un centro asistencial por la gravedad de las quemaduras.
Las víctimas quedaron bajo protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), que inició los protocolos para el restablecimiento de sus derechos.
Entretanto, la madre deberá seguir compareciendo al proceso en libertad, debido a que el ente acusador no contaba con los requisitos de ley para solicitarla, entre ellos que la mujer no tiene antecedentes penales.
Condenan a los asesinos del heladero de Huila
Tras demostrar el plan criminal perpetrado contra el comerciante de helados Hernando Sánchez Polanco, en Rivera (Huila) en mayo de 2018, un juez condenó a Laura Daniela Charry Toro y Jhon Fredy Hoyos Sánchez, a 34 años y 4 meses de prisión.
Los dos condenados responderán en prisión por los delitos de homicidio agravado en concurso con fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones agravado; y hurto calificado y agravado en grado de tentativa.
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De igual manera, el juez les impuso la pena accesoria de inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas por 20 años, y no les concedió subrogados penales.
Según la investigación que adelantó un fiscal de la Unidad de Vida de la Seccional Huila, cuatro personas, entre ellas los hoy condenados, planeaban apoderarse de dineros del reconocido comerciante en esa región, Sánchez Polanco. Así, ingresaron a su casa a altas horas de la noche donde funcionaba el negocio y, cuando se vieron descubiertos por la víctima, le dispararon con un arma de fuego causándole la muerte y luego huyeron.