Adrián Fernando Agudelo Lopera.
Adrián Fernando Agudelo Lopera.
Cortesía: familiares.
3 Abr 2021 09:23 AM

Hijo de concejal de Chigorodó (Antioquia) murió de covid-19 en Perú

Johanna
Ramírez Gil
La familia pidió a la Embajada de Colombia gestionar el traslado de las cenizas a Urabá.

En un hospital de Chiclayo, Perú, murió Adrián Fernando Agudelo Lopera, hijo del concejal de Chigorodó, Hernando Agudelo. El hombre, de 33 años, se contagió de covid-19, estuvo ocho días en casa recibiendo tratamiento médico, hasta que empeoró su estado de salud y tuvieron que ingresarlo a cuidados intensivos, donde falleció. 

Tenía una enfermedad de base en un pulmón a raíz de trabajar varios años en una empresa de químicos en Medellín.

Más información: Alcalde de Girardota, Antioquia, solicitará al Gobierno autorización para comprar vacunas

El concejal Hernando Agudelo le solicitó ayuda a la Embajada de Colombia en Perú para que el cuerpo de su hijo sea cremado y las cenizas entregadas a su compañera sentimental que está en el vecino país.

"Estamos pidiendo a la Embajada de Colombia que nos ayude a gestionar para que le entreguen el cuerpo a la compañera sentimental y lo cremen. No queremos que nos vayan a enterrar a nuestro hijo allá en Perú.  Al menos, que podamos traer las cenizas a Chigorodó. Estamos esperando que ella nos diga qué papeles necesita para enviárselos y así autorizar la cremación", señaló el padre de Adrián.

Lea además: Antioquia gestiona traslado de pacientes críticos a otras regiones

Según los familiares, Adrián Fernando Agudelo se contagió en el hospital, donde fue atendido por su enfermedad pulmonar que tenía de tiempo atrás.

Llevaba tres años viviendo en Perú y vino en diciembre para visitar a sus seres queridos en el Urabá antioqueño. Era aficionado a Atlético Nacional. Su compañera sentimental es colombiana y se encuentra en buenas condiciones de salud.

Esta semana, los familiares publicaron un video pidiendo ayuda para financiar los gastos médicos de Adrián Fernando. Aseguraron que había escasez de camas de cuidados intensivos en Perú y trasladarlo a un hospital particular costaba 50 millones de pesos colombianos.