La iglesia se ofreció para acompañar la mesa de diálogos con los mineros del municipio de Buriticá, Antioquia
Por los problemas que se han presentado en el municipio de Buriticá, Occidente antioqueño, donde mineros informales bloquearon la vía hacía el Urabá y generaron la quema de un vehículo, la Arquidiócesis de Santa Fe de Antioquia, la Fundación Pastoral Social y la Delegación de la Pastoral Minera manifestaron su preocupación por los recientes acontecimientos relacionados con la minería extractiva en el municipio.
Además, lamentaron los problemas surgidos por la actividad minera del sector, donde denunciaron la desaparición de trabajadores, confinaron a la población civil, bloquearon las vías nacionales y municipales, destruyeron propiedades privadas y expusieron a viajeros y residentes a amenazas y actos vandálicos.
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Por eso llamaron a las autoridades nacionales y departamentales para que sigan trabajando en el saneamiento de la población y la protección del medio ambiente. Además, pidieron a los actores involucrados en la minería, formales e informales, avanzar en procesos de formalización para garantizar una minería segura, justa y equitativa, en armonía con el medio ambiente y el orden social.
Desde la iglesia católica se ofrecieron a acompañar la mesa de diálogo para buscar soluciones que protejan vidas, mejoren la calidad del trabajo, promuevan el comercio justo, cumplan con las normativas y protejan los recursos naturales.
Así mismo, enfatizaron en la necesidad de ampliar el impacto de la responsabilidad social empresarial y erradicar la ilegalidad y la corrupción.
Monseñor Hugo Alberto Torres Marín, Arzobispo de Santa Fe de Antioquia, y el Pbro. Henry Yoan David Úsuga, Párroco de "San Antonio" de Buriticá y Delegado de Pastoral Minera de la Arquidiócesis de Santa Fe de Antioquia, expresó que se encuentran brindará apoyo afectivo y espiritual a la comunidad y se encuentra pidiendo la intercesión de San Antonio de Buriticá para lograr el milagro de la paz y el desarrollo integral del territorio