Tigrilla lanuda - 2024 - Antioquia
Tigrilla lanuda - 2024 - Antioquia
Área Metropolitana del Valle de Aburrá
20 Dic 2024 08:51 AM

Liberan a tigrilla lanuda tras ser rescatada en pésimas condiciones

Verónica
Gómez Perea
“Este se convierte en el proceso de rehabilitación más importante del año en nuestro CAVR", directora del Área Metropolitana.

El Área Metropolitana del Valle de Aburrá informó sobre la liberación de una tigrilla lanuda rescatada de cautiverio en el municipio de Urrao, Suroeste de Antioquia.

El proceso de recuperación y liberación fue calificado como el caso más exitoso de rehabilitación del Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Silvestre y marca un hito en los esfuerzos por la conservación de la fauna silvestre en la región. 

Desde Corpourabá estamos muy felices porque en conjunto con el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, hemos logrado retornar a su hábitat natural a esta tigrilla lanuda. Extendemos una gran invitación a la comunidad en general, a no tener en cautiverio nuestra fauna silvestre, estas especies contribuyen a tener un ecosistema sano”, afirmó Jorge David Tamayo, director general (e) de Corpourabá. 

El animal fue encontrado en octubre del 2023 por personal de Corpourabá en una vivienda en zona rural del municipio, y fue trasladado al Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Silvestre. Su estado era crítico: letárgica, deshidratada, con poco peso y un pelaje descuidado que reflejaba las consecuencias de no estar en su hábitat con sus padres. 

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"La tigrilla fue trasladada a Medellín con apenas cuatro meses de nacida y en un estado físico de deterioro", indicó la directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Paula Jaramillo.  

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De acuerdo con la entidad, en la sala de neonatos del CAVR, recibió una crianza asistida y artificial suministrando inicialmente un lacto reemplazado que suplía el balance de sus requerimientos nutricionales; donde aprendió no solo a alimentarse adecuadamente, sino también a asociar a los humanos como una amenaza, un paso clave para garantizar su independencia. 

Durante más de siete meses, la tigrilla estuvo en un recinto aislado donde tuvo enriquecimientos físicos, sensoriales y nutricionales que le enseñaron a cazar e identificar refugios, logrando que el animal incorporara las conductas que necesita para sobrevivir de manera autónoma en su ecosistema. Este proceso permitió que triplicara su peso inicial y recuperara la vitalidad que la caracteriza como especie, gracias al trabajo de veterinarios, biólogos, zootecnistas y cuidadores del equipo del CAVR del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.