Empleada de aerolínea fue absorbida "violentamente" por una turbina de avión en Alabama, EE. UU.

Una agente de asistencia en tierra, identificada como Courtney Edwards, de 34 años, murió en la víspera de Año Nuevo en un accidente en el Aeropuerto Regional de Montgomery, Alabama (EE. UU). La mujer trabajaba para Piedmont Airlines (una subsidiaria de American Airlines) según detalló la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte.

El informe preliminar de las autoridades, reveló que antes de su muerte, un compañero de trabajo la vio demasiado cerca de la turbina del avión y le advirtió que se alejara y se mantuviera la distancia hasta que los motores se apagaran.

Otro trabajador en tierra, al otro lado de la aeronave, retrocedió después de que un piloto se asomara por la ventana y le advirtiera que los motores aún estaban funcionando.

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Al parecer, Edwards hizo caso omiso, y caminó frente al jet Embraer E175 que advertía mantener la distancia con un cono de seguridad naranja y fue "absorbida y arrastrada dentro del motor en funcionamiento".

Posteriormente, un copiloto informó que el “avión se sacudió violentamente seguido del apagado automático inmediato”.

En los protocolos aeronáuticos y el manual de American Eagle revisado en el mes de julio pasado, se le advierte a los trabajadores que nunca se acerquen a menos de 4.600 metros de la parte delantera de una turbina, un área llamada "zona de ingestión", hasta que las aspas del motor dejen de funcionar.

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Al conocer el lamentable hecho, varias personas crearon una campaña en GoFundMe que ya recaudó donaciones por 102.000 dólares para ayudar a la familia de Courtney Edwards, que dejó a tres hijos pequeños y su madre.