En una hora y media, dos hombres fueron asesinados en hechos aislados ocurridos la vereda Maracaná y en el corregimiento La Caucana en zona rural de Tarazá.
Las víctimas fueron identificadas como el ganadero Jairo Humberto Gutiérrez, de 53 años, quien había sido reportado como desaparecido; y Humberto Londoño, quien sería un líder campesino.
Así lo indicó el vocero de la ONG Nodo Antioquia, Óscar Jesid Zapata, quien aseguró que el hombre lideraba procesos de conciliación en su comunidad.
Expresó su preocupación por la seguridad de los defensores de Derechos Humanos en el Bajo Cauca y en el departamento.
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"Hacía parte de la comisión de la Junta de Acción Comunal de Conciliación y también era miembro de la Asociación ampesina. Nos preocupa porque ya hemos hecho varias alertas y el Bajo Cauca está bajo el dominio de estructuras paramilitares y de otras organizaciones", explicó.
El comandante de la Policía Antioquia, coronel Giovanny Buitrago, dijo que avanzan en las investigaciones para esclarecer los dos homicidios. Además, señaló que se adelanta una verificación en las bases de datos porque ninguna de las víctimas, por ahora, sería un líder social.
"Todavía no tenemos ningún reporte que nos señale que alguno de los ciudadanos sea un líder social (...). Los cuerpos llegaron a la cabecera municipal, donde la policía se entera de la situación y procede a la inspección del cadáver. Estamos indagando mayor información para saber qué pudo haber ocurrido con los homicidios de estas personas", puntualizó el alto oficial.
Según el Observatorio de Derechos Humanos de la fundación Sumapaz y Nodo Antioquia, 24 líderes han sido asesinados este año en el departamento.
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Protección a amenazados
El Bajo Cauca, el Norte y el Nordeste de Antioquia son las regiones donde más líderes y defensores de Derechos Humanos han sido amenazados de muerte.
El Clan de Golfo, Los Caparros y el ELN serían los principales autores de las amenazas.
La Gobernación tiene documentados 185 casos, la mayoría de dirigentes sociales que trabajan en proyectos de sustitución de cultivos ilícitos que se disputan los grupos armados ilegales.